El comunicado oficial señala que el cerramiento tiene por objetivo “mejorar la seguridad, delimitar sectores y facilitar la organización de eventos y actividades culturales”, pero el alambrado separa los galpones de los carritos, y emprendedores de la zona expresaron su malestar ante la medida.
Manifestaron al móvil que ahora no tienen acceso a los baños, entre otras incomodidades que aparecen después del vallado.
“Yo soy una jubilada y con eso no vivo, por eso tengo el carro. El intendente vino a los carros a buscar el voto. Dijo que no íbamos a tener problemas y se sacó fotos. Ahora no aparece”, dijo una carritera.
A los trabajadores se les informó que el alambrado sería provisorio, pero finalmente se confirmó mediante la página oficial, que “separa de forma permanente las naves de los Galpones del Puerto del área de los carritos gastronómicos y parte del parque aledaño en dirección al río”.
“Dejaron espacios públicos con alambrado, o hay que darse toda una vuelta para estar ahí. A veces los que trabajan no tienen acceso a los baños, que supuestamente son públicos, pero ya no”, señalaron las trabajadoras del lugar, y aseguran que llevaron el reclamo hasta la ciudad de Paraná donde también dieron a conocer la situación.
“El vallado no nos deja lugar para las mesas. Queremos saber qué es lo que pasa. Nosotros no molestamos a nadie”, expresó una mujer y piden la presencia de las autoridades en el lugar.