“Ahora me escuchan a mí, como escucharon a mi familia en la primera marcha. Quiero que salga la fecha del juicio para estar un poco más tranquila, para sacarme esta mochila pesada que llevo a todos lados.
Las marcas del cuerpo las voy a sobrellevar. Veo mi cuerpo y veo mi cara marcada. Pero lo que siento es un vacío y angustia. Saco fuerzas de donde no hay. Pero el dolor que siento está adentro”.
Por otra parte, Rocío relató que la familia de Sire no se volvió a contactar con ella. Sin embargo, señala “Me pongo en el lugar de mamá y creo que ninguna mamá tiene que pasar por lo que él hizo”.
A su vez, Barrozo contó que dos mujeres que fueron víctimas de Sire están en contacto con ella. “Una vive en el sur y otra en Zarate”. Y segun lo que relató, esta última quiere abrir su caso. Mientras que la que vive en el sur no quiere saber nada. “Una amiga se la llevó y no volvió nunca más”.
En relación a los hechos, Rocío Barrozo habló sobre la verguenza y la imposibilidad de hablar : “No nos animamos a hablar, es tan grande el miedo que tenemos que no nos animamos. Yo creo que uno también siente vergüenza, me pasa a mi que la gente sabe cómo soy yo en mi vida, que nadie me llevaba por encima y me da vergüenza pedir ayuda y decir a mi me toco”.
El relato de la hija
Por otro lado, Verena, la hija de Rocío, cuenta que todavía no ha recibido ayuda psicológica para paliar la situación vivida y expresa que no puede dormir de noche y tiene miedo de salir sola a la calle.
“Todavía me siguen buscando asistencia psicológica, y todavía no me han conseguido, ya pasó un mes. Mandaron al Copnaf de que tenían que hacerse cargo, no me han llamado, me mandaron al hospital y el hospital me dijo que se tenía que hacer cargo el Copnaf. En ese momento no me di cuenta de nada, y ya pasó un mes y para mi es muy traumático”.
Finalmente, Rocío manifiesta :”Una lo mira por la tele y todos los días me pregunto por qué a mí. Me considero una buena persona, pero me toco y también estoy acá por algo, para que se haga justicia, para que no haya más víctimas de parte de él. Y porque no haya ninguna víctima más. Que cambien las leyes, que no sean tan livianas para estos acosadores que tienen la libertad de hacer esto”.
Y agrega: En la comisaría de la mujer cuando fui con una amiga a hacer la denuncia me preguntaron si tenía golpes y mi amiga preguntó ¿Ella tiene que venir muerta para que le tomen la denuncia?Que salga rápido el juicio y que no le den 90 días más. Estar en mi casa se hace muy difícil, paso muchas noches sin dormir. Quiero que se haga justicia”.
