

La última epidemia provocó aproximadamente 500 mil casos en el país, de los cuales, cerca de 19 mil casos se dieron en la provincia de Entre Ríos.
Burroni explicó que el exceso de población de mosquitos se vio favorecida por el inicio de las condiciones climáticas de La Niña, posteriores a una gran sequía. En este marco, “las hembras, en una población tan alta, dejaron una cantidad de huevos impresionante. Esos huevos están en nuestras casas y están muy lejos todavía de ser larvas de adulto y es mucho más fácil eliminarlos ahora”.
La doctora remarcó que la temporada invernal posibilita trabajar en la prevención sin insecticidas. “Tenemos que ir a nuestros jardines y fondos para actuar sobre los posibles criaderos, aunque hoy veamos secos esos sitios”, sobre este aspecto señaló que los huevos permanecen en los recipientes secos a la espera de las temperaturas adecuadas y humedades mínimas. “Hay que lavarlos con un cepillo y tirar agua hirviendo sobre rejillas y cubiertas”, recomendó.