

Corría el mes de septiembre de 1845. Hace exactamente 180 años, Giuseppe Garibaldi, héroe de la unificación italiana, pero también protagonista de episodios violentos en nuestras tierras, tomó por asalto una casona ubicada frente a la plaza principal de Gualeguaychú, la misma que hoy conocemos como Museo Haedo.
Este hecho, que marcó la historia de la ciudad, no solo quedó registrado en la memoria colectiva, sino también en publicaciones de la época. Gracias a un artículo periodístico de la revista Caras y Caretas de 1918, podemos revivir parte de aquel momento dramático a través de los recuerdos de Victoria Haedo, una de las jóvenes que habitaba la casa en ese entonces.
En su testimonio, la mujer relata con claridad la irrupción de las tropas en la tranquilidad familiar:
— Así que, señora, ¿aquí se instaló Garibaldi con sus tropas?— Sí, señor; aquí formaron cantón… Como esta esquina domina la plaza, sus hombres ocuparon la azotea…
Con apenas doce años, Victoria fue testigo, junto a su hermana mayor de dieciocho, de cómo un grupo armado irrumpía al amanecer:
— Teníamos la costumbre de madrugar para cebar mate a mamá. Estaba por salir el sol cuando vimos unos hombres que venían desde la Confitería Independencia, cerca de la jefatura… Corrimos a avisar a nuestros padres y poco después comenzaron los disparos. Nos encerraron en una habitación, donde permanecimos durante toda la ocupación.
Ante la pregunta de si habían sufrido algún tipo de atropello, Victoria respondió con alivio:
— Nosotras ninguna… Al contrario, cuando uno de los hombres intentó forzar la puerta de nuestra pieza, un jefe lo castigó con latigazos y lo amenazó con algo peor si desobedecía…
Estos fragmentos permiten acercarnos al clima de tensión y temor que vivió la familia Haedo y, al mismo tiempo, reflejan la magnitud de los acontecimientos de septiembre de 1845.
Hoy, la casona donde todo sucedió se erige como un espacio de memoria y patrimonio para la ciudad. El Museo Haedo se conserva como testimonio de aquel sucesoo y resguarda parte esencial de la historia local, abriendo sus puertas a la comunidad para que estas memorias sigan vivas.
La tarea que realizan los museos de Gualeguaychú es fundamental para mantener vigente nuestro pasado, fortalecer la identidad colectiva y transmitir a las nuevas generaciones el valor de la cultura y la memoria histórica. Cada visita es una oportunidad de reconocernos en lo que fuimos y comprender mejor lo que somos.
Si querés conocer en profundidad esta historia y recorrer el lugar donde todo sucedió, podés visitar el Museo Haedo:
Miércoles a viernes: 9 a 12 y 12:30 a 17:30.
Sábados y domingos: 10 a 13.