ofrecida por los postulantes. Aunque no se aplicarán subsidios ni cánones al Estado, los peajes actuales seguirán vigentes hasta que se logre un estándar óptimo de transitabilidad. Esto incluye “bache cero”, señalización adecuada e iluminación.
Además, el Estado establecerá una tarifa máxima y un sistema de actualización trimestral basado en índices del INDEC. Durante el primer año, las empresas deberán realizar las obras necesarias para mejorar las rutas, y el cobro de tarifas ajustadas comenzará a partir del segundo año.
Supervisión por parte de Vialidad Nacional
La Dirección Nacional de Vialidad será la encargada de auditar las concesiones, midiendo el estado de las calzadas, la señalización y otros elementos esenciales. Este control será clave para garantizar que las empresas cumplan con los estándares de calidad establecidos.