Selva Chesini indicó que “El Defensor del Pueblo tendrá autonomía y una de sus funciones es controlar irregularidades que se susciten entre los ciudadanos y los entes estatales, para canalizar consultas”.
La concejal señaló que “es de suma importancia haber creado la figura que existe en Buenos Aires y en Paraná”. Las personas que ocuparán el cargo, serán elegidas por cinco años y deberán mediar frente a “cualquier tipo de vulneración de derechos de parte de los funcionarios en ejercicio de su función, en cualquier órgano estatal”. También podrán proponer la creación o modificación de normas, si se entiende que las vigentes están violando u omitiendo algún tipo de derecho. Tendrán la facultad además, de mediar con cualquier ente del Estado y de pedir información, e incluso citar a los agentes del Estado.
Respecto al presupuesto, Chesini manifestó que ya hay uno asignado para esta área en formación. La estructura inicial prevista, contempla al defensor titular y un adjunto, y una mínima estructura administrativa. “Si queremos pensar en un órgano que de respuestas a la sociedad no tiene un techo”, subrayó.
Asimismo, aclaró que desde el mismo organismo creado se podrá presentar un proyecto para ampliar el presupuesto, en caso de considerarse necesario, en base a lo que se haya podido trabajar en su primer año de actividad.
En relación a la designación, dijo que se abrió un registro y se inscribieron 12 aspirantes, sobre ellos se evaluarán los antecedentes en un plazo de siete días y posteriormente, en la sesión del 24 de noviembre, los concejales votarán para elegir a las personas que se adapten a las exigencias del cargo.
Para que la responsabilidad de defensor del Pueblo sea adjudicada, se necesitarán nueve votos y otros nueve para designar al adjunto. Si no se logran los nueve votos, el cargo queda vacante y se deberá realizar una nueva sesión.