Diego Rodrí­guez: "Me siento responsable que Del Potro haya jugado la Copa Davis"

El kinesiólogo Diego Rodríguez, profesional de Gualeguaychú que recuperó a Juan Martín Del Potro, dijo en RADIO MÁXIMA que el incidió en que el tenista jugara la Copa Davis, pero aclaró que para el triunfo colaboró una gran cantidad de personas. “Si vos hacés las cosas bien, el resultado aparece. Y si no aparece, tenés que chequear si te faltó algo. Y el tenis se define como un duelo emocional”, agregó.

Rodríguez manifestó que “armamos un plan de trabajo en base a las necesidades del deportista en ese momento por el cual estaba atravesando, lo consensuamos con él. Todo apunta a la prevención y al auto cuidado porque ya no se ejecuta la kinesiología de antaño, el deporte de alta competitividad ha cambiado mucho. Si yo quisiera aplicar con Del Potro lo que hacía cuando estaba con Nalbandian o quisiera utilizar el método que se aplicaba con Guillermo Vilas en su época, no daría ningún resultado. El tenis cambió, hay otra velocidad y el desgaste del cuerpo y las lesiones también son otras, cambiaron. Cuando yo estudié kinesiología, tuve que aprender lo que era un codo de tenista. En 20 años nunca vi un codo de tenista, porque estos profesionales le pegan de tal manera a la pelota que no se provocan esa lesión”.

Rodríguez puntualizó que “yo siempre creí que el trabajo con un tenista era full time. Pero me equivoqué: es full life, tenés que estar todo el día y en todo momento pensando en como hacer para que ese organismo esté no solo sano, sino que rinda al máximo. Y lo que ocurre es que no hay una receta única, no hay manual para lograrlo. Hay que evaluar al deportista, ver cómo es su personalidad, cómo piensa, cómo siente, cuántas horas duerme, si disfruta lo que hace, cómo es su entorno familiar, cuántos amigos tiene y si son nocivos o no para él, observar su contexto emocional porque en definitiva, el tenis, se define como un duelo emocional. Las diferencias técnicas entre los tenistas de elite son muy sutiles, por eso lo emocional es la clave”.